Esta es una página de difusión de la Fe Cristiana a la luz del Magisterio de la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana.

«Es impensable que un hombre haya acogido la Palabra y se haya entregado al Reino sin convertirse en alguien que a su vez da Testimonio y Anuncia». (B. Pablo VI, Evangelii Nuntiandi, nº 24)
CONVERTÍOS


«Convertíos a Mí de todo corazón», y que vuestra penitencia interior se manifieste por «medio del ayuno, del llanto y de las lágrimas» (Jl 2,12). Así ayunando ahora, seréis luego saciados; llorando ahora, podréis luego reír; lamentándoos ahora, seréis luego consolados (Lc 6,21; Mt 5,5)... Así os digo que «no rasguéis vuestras vestiduras, sino vuestros corazones» (Jl 2,13) repletos de pecado.
Cuando, pues, hayáis rasgado de esta manera vuestro corazón, volved al Señor, vuestro Dios, de Quien os habías apartado por vuestros antiguos pecados, y no dudéis del Perdón, pues por grandes que sean vuestras culpas, la magnitud de Su Misericordia Perdonará, sin duda, la verdad de vuestros muchos pecados.. Pues el Señor Es Compasivo y Misericordioso, Él no se complace en la Muerte del pecador (Ez 33, 11). «Paciente y Rico en Misericordia» (Jl 2, 13), Él no es impaciente como el hombre, sino que Espera sin prisas nuestra Conversión». (S. Jerónimo, Doctor de la Iglesia)
Semper Mariam In Cordis Tuo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario